El 28 de septiembre de
2012 (vaya, ¡cómo pasa el tiempo!) decía en el blog estas palabras:
Cuando uno
se topa con un título como Charlie Marlow y La Rata Gigante de Sumatra, puede
llegar a pensar muchas cosas, pocos pensarían que se trata de una de las
últimas aventuras del legendario detective de la calle Baker. Pero en efecto lo es, o al
menos eso es lo que asegura su autor Alberto López Aroca, quien en el pasado ya
nos ha deleitado con muy buenas obras como Estudio en esmeralda o Sherlock Holmes y
los zombies de Camford (como puede verse, no es necesario ser un
Holmes para notar un patrón aquí).
En
cualquier caso, Alberto nos ha obsequiado a través de su blog (ya sea en
descarga directa u online) los dos primeros capítulos de su próxima novela. Y
bien, tras leerlos sólo puedo decir que promete, y promete mucho. Quizá el
inicio no nos diga mucho (quizá), algunos caballeros ingleses de finales del
siglo XIX hablando como caballeros ingleses del siglo XIX, pero después de
pocas líneas nos topamos con un nombre conocido, Mycroft Holmes (hermano del
detective) y a partir de entonces ya podemos comenzar a darnos cuenta de dónde
estamos parados (o quizá no).
Poco
después nos topamos con un par de referencias extrañas, el Club Diógenes, y el
navío Matilda Briggs (una relación muy sutil aunque interesante con el famoso
barco fantasma Mary Celeste, en el que el mismo Conan Doyle mostró interés. En
definitiva, la cosa pinta bien. Y justo cuando comenzamos a ansiar saber más,
el segundo capítulo llega a su final, dejándonos con algunas dudas: ¿qué es
exactamente el Club Diógenes?, ¿en qué consiste el cargamento del Matilda
Briggs?, ¿los personajes son realmente lo que creemos que son?, ¿son estas las
preguntas adecuadas?
Sólo el
tiempo lo dirá, mientras tanto no le pierdan la pista a esta prometedora
historia que esperemos pronto salga a la venta.
Y así fue. A finales de 2012 esta obra
vio la luz, sin embargo por cuestiones que no vienen al caso mencionar aquí, no
me fue posible darme a su lectura sino hasta hace unos cuantos días.
Decir que me ha encantado y que es de
esas lecturas que uno está seguro que lo acompañara durante mucho tiempo, es
poco. Charlie Marlow y la Rata Gigante de
Sumatra es una GRAN obra, un homenaje al maestro de Baker Street y una
autentica gozada para todos aquellos que todavía después de tantos años siguen
con gran interés las andanzas del primer detective consultor del mundo.
Pero no nos adelantemos y veamos, sin develar
importantes aspectos de la trama, qué nos encontramos dentro de las páginas de Charlie Marlow y la Rata Gigante de Sumatra.
Todo inicia con un grupo de caballeros que en una anodina reunión son
deleitados con una extravagante historia protagonizada por un marinero de nombre
Charles Marlow y un misterioso y poco convencional explorador noruego llamado
Sigerson. Ambos hombres son comisionados por El Club Diógenes o lo que es lo
mismo, por el señor Mycroft Holmes, para localizar un navío de carga llamado
Matilda Briggs. El cual no sólo está relacionado con otro barco, el misterioso
y celebre Mary Celeste, sino también con un peculiar caso del detective de
Baker Street, el de la Rata Gigante de Sumatra, el cual nunca fue recogido por
Watson, ya fuera porque Holmes jamás le compartió los detalles, o bien porque
éste no le permitió poner por escrito los detalles del caso.
Sin embargo, poco importa si el mundo
está o no preparado para conocer la verdad sobre los sucesos ocurridos en
cierta misteriosa pero familiar isla, lo que allí moraba y las extravagantes
personalidades que se dieron cita en ese lugar, pues Alberto no tiene el menor
inconveniente en contarnos todos los detalles, incluyendo algunos ciertamente
extraordinarios, como el truculento encuentro entre Sigerson el noruego y cierta
diosa antigua, tras lo cual les aseguro que no podrán volver a ver a Holmes de
la misma manera.
Francamente
no sé qué esperaba de Charlie Marlow y la Rata Gigante de Sumatra, pero cada
página es un continuo maravillarse y no querer parar, pues los sucesos que nos
son narrados están tan bien presentados y muestran una secuencia de hechos tan
interesante que es difícil que uno quiera abandonar la lectura. Y es que
encontrar al elusivo Matilda Briggs es sólo el primer paso a una aventura mucho
más grande, la cual no termina en el libro, ni siquiera dentro del Canon
Sherlockiano ni tal vez en cierta película de ciencia ficción muy famosa, de la
cual se han hecho diversos remakes, protagonizada por cierta creatura de
colosales dimensiones.
Sin
lugar a dudas Alberto López Aroca demuestra ser un gran mitógrafo creativo y un
magnifico narrador, pues en las páginas de su obra se despliegan una enorme
cantidad de lugares, situaciones y personajes que nos remiten a imaginarios ya
conocidos de antemano. Por supuesto, no todos ellos son fácilmente
reconocibles, pues apenas si están insinuados o se encuentran tan bien
trabajados que aunque resultan familiares cobran nuevos significados en una
trama que se complejiza y enriquece con cada palabra que se lee.
A pesar
de lo anterior, la lectura es bastante fluida y aunque la cantidad de
información y referencias que se vierten en ocasiones pueden parecer muchas, al
final de la novela el autor nos ha obsequiado un magnifico índice onomástico
repleto de información que no sólo enriquece y aclara varios aspectos de la
novela, sino que también invita a conocer otros imaginarios injustamente
pasados por alto demasiadas veces.
En
términos narrativos tengo que decir que la obra es impecable, las descripciones
no son exhaustivas, pero si suficientes para ponernos en sintonía que lo que
ocurre, lo que dada la naturaleza de lo narrado es más que apropiado. Los
personajes actúan tal y como deben y no es nada difícil ponernos en su lugar y
sufrir las aventuras y desventuras que continuamente les presenta el argumento.
Mención especial merecen el capitán Marlow, con ese léxico tan florido, su fijación
por cierta joven de veintitantos, la cual está desafortunadamente muy, pero muy
lejos de su alcance (de él y de cualquier hombre con los pies sobre la tierra)
y su carácter aventurero y un tanto neurótico; el noruego Sigerson que no es
quien dice ser, pero que es como debe ser; el profesor Severus Magog Sivane,
malvado e inteligente hombrecillo a quien le debemos todo el desaguisado y el
cazador/coronel que sigue la pista del noruego para saldar una antigua deuda
que lamentablemente no pudo saldar en su momento por no tener (lo que es de
sorprender) a la mano su letal instrumento.
Y si
bien esta aventura sherlockiana no cuenta con la aparición del buen doctor
Watson, pues sucede en el periodo en el que el detective se encontraba muerto
para la opinión pública, sí que hay un Watson en la historia, uno del todo
inesperado, sorprendente y destinado a grandes, grandes cosas. Su aparición es
por demás curiosa, no exenta de humor y por extraña que sea, encaja muy bien en
la trama. No revelaré quién es este “otro” Watson para no arruinarle la grata
sorpresa a nadie, aunque sí puedo decir que es un personaje bastante conocido y
muy ligado a la isla en la que vive.
Siguiendo
con el apartado de personajes, tengo que admitir que Alberto fue muy
inteligente al darle el protagonismo a Charlie Marlow, pues de este modo Holmes
puede ser Holmes y así hacer lo que mejor sabe hacer sin que se le saturara
argumentalmente o en los diálogos, pero sin duda su protagonismo a lo largo de
la historia se deja sentir.
No diré nada más, pues temo que la
hacerlo ya pueda estar revelando elementos de la trama que es mejor cada uno
descubra por sí mismo, así que sólo me limitare a decir que Charlie Marlow y la Rata Gigante de Sumatra es
una novela imperdible que en lo absoluto desentona con el Canon establecido por
Conan Doyle y cuya continuidad queda más que demostrada en su final, que será
del agrado no únicamente de los seguidores de Sherlock Holmes o para los que
gustan de las obras de mitología creativa, sino para cualquiera que disfrute de
la buena literatura.
Me olvidaba de mencionar, pero esta magnífica
obra tiene una breve epilogo llamado: La
Rata Gigante de Sumatra en el Oeste, en donde se da cuenta del destino de
uno de los personajes más misteriosos, así como una continuación: Los náufragos de Venus, la cual se
encuentra disponible desde hace unas semanas. Todas estos trabajos pueden
adquirirse en la tienda del autor: Obras a la venta de Alberto López Aroca
¿Quién es este extraño sujeto?
Tal vez la respuesta se encuentre en Venus...
Características
Título: Charlie Marlow y la Rata Gigante de Sumatra
Autor(es): Alberto López
Aroca
Tema: Aventuras, ciencia
ficción. Sherlock Holmes
Editorial: Academia de
Mitología Creativa "Jules Verne"
Edición: Primera, rustica
Año: 2012
ISBN: En tramite
Páginas: 304
Precio: 18€
Lo mejor
La obra en su conjunto es
una auténtica maravilla repleta de aventura, humor, deducciones, intrincadas
referencias y grandes personajes. Su respeto al Canon Sherlockiano. El gran
diseño del libro, sobrio, elegante y minimalista.
Lo peor
Este es uno de esos
casos, escasos por desgracia, en los que aunque uno lo quiera no es capaz de
señalar puntos negativos. Tal como he dicho, una lectura que no se olvidará con
facilidad.
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